Cada cuatro años, millones de personas aficionadas al fútbol conectan con canales como TVE y Telemundo para ver a sus futbolistas favoritos jugar en el torneo más importante del mundo: la Copa Mundial. Pero este año, verán los partidos en Qatar, un país que castiga a las personas por ser simplemente LGBT+.

A pocos meses del Mundial, las cadenas de TV presentarán la nación moderna y cosmopolita en la que se ha convertido Qatar. Pero también tienen la responsabilidad de mostrar el peligroso y grave trato que reciben las personas LGBT+ en Qatar.

Estas cadenas no pueden limitarse a mostrar los nuevos y atractivos estadios y modernos rascacielos . Deben hablar de la realidad que viven las personas qataríes LGBT+, que incluye entre 3 y 5 años de prisión e incluso la pena de muerte por ser gay.

Y estas cadenas no deberían tener ningún problema en hacerlo. Ambas, TVE y Telemundo, supuestamente valoran la inclusión y la diversidad y respetan los derechos humanos, al menos según los manifiestos de sus empresas. De hecho, Telemundo anima a sus "talentos de primera línea a que apliquen sus voces al tema de la inclusión, la representación y su intersección con la cultura deportiva", como se indica en su página web.

Se supone que el fútbol es para todes. Al igual que muchos deportes, a menudo se promociona como una forma de unir a las comunidades a través del orgullo, el trabajo en equipo y la diversidad.

¿Le dirás a TVE y a Telemundo que pidan responsabilidad a la FIFA y a los funcionarios qataríes por su LGBTfobia?