Estas peligrosas prácticas que buscan "curar" a las personas LGBT+ siguen ocurriendo en Indonesia, y dejan a sus víctimas con daños físicos y mentales permanentes. Ahora tenemos una oportunidad de lograr que se prohíban. ¡Necesitamos tu ayuda
Las llamadas "terapias de conversión" siguen existiendo en Indonesia.
Las personas de la comunidad LGBT+ de Indonesia siguen sufriendo esta forma de tortura. Normalmente involucran a instituciones religiosas.
Arisdo González, activista gay de la OSC "Pelangi Nusantara", habló sobre las prácticas de "terapia de conversión" en Indonesia en su entrevista:
"Empezó cuando estaba confuso sobre mi sexualidad y mi identidad de género, sobre todo en el instituto, cuando me acosaban. Había una profesora a la que le dije que era gay y ella... me aconsejó que fuera a una iglesia. El domingo siguiente fui a la iglesia para reunirme con un pastor para recibir asesoramiento. El pastor hizo referencia a unas escrituras y [habló de] ser homosexual basándose en la Biblia. Y pensé: "Dios mío, estoy muy equivocado, necesito cambiar". El pastor me dio un poco de aceite sagrado, me lo echó en la cabeza y empezó a rezar [para convertirme] de homosexual a heterosexual. Y pensé que me había curado, pero al día siguiente seguía interesándome por los hombres. El impacto de esta práctica fue realmente malo y me sentí deprimida. No quería ser heterosexual, no quería ser masculino, pero me obligaron a ser así, utilizando las escrituras, y eso me hizo mucho daño. En mi vida, aprendí que no necesitas que te cambien, que has nacido para ser gay y que debes estar orgulloso de serlo."
Para ver la entrevista completa de Arisdo González, haz clic aquí.
Al igual que Arisdo González, muchos miembros de la comunidad LGBTIQ de Indonesia han sido víctimas de prácticas nocivas de "terapia de conversión", que siguen realizando personas, familiares, profesionales médicos y líderes religiosos y comunitarios.
"Terapia de conversión" se utiliza como término general para describir intervenciones de naturaleza muy diversa, todas las cuales tienen en común la creencia de que la orientación sexual o la identidad de género (SOGI) de una persona pueden y deben cambiarse.
Se trata de intervenciones profundamente perjudiciales que se basan en la idea médicamente falsa de que las personas LGBTIQ están enfermas, infligen dolor y sufrimiento graves y provocan daños psicológicos y físicos duraderos.
En 2020, el Experto Independiente de la ONU sobre SOGI, pidió la prohibición mundial de la "terapia de conversión" y señaló:
"Las prácticas de terapia de conversión infligen dolor y sufrimiento graves a las personas lesbianas, gays, bisexuales, trans y de género diverso (LGBT), y a menudo provocan daños psicológicos y físicos duraderos", y "tales prácticas constituyen una violación atroz de los derechos a la autonomía corporal, a la salud y a la libre expresión de la propia orientación sexual e identidad de género".
Pero ahora, Indonesia tiene la oportunidad de poner fin a esto, ¡de una vez por todas!
Firma ahora para exigir la prohibición total de la "terapia de conversión" en Indonesia.
Esta campaña está dirigida por ILGA Asia junto con GAYa Nusantara, Yayasan Pesona Bumi Pasundan, Pelangi Nusantara y Arus Pelangi.