La activista trans Lilit Martirosyan fue detenida ilegalmente y humillada en Dubái. Exige que Emirates investigue y se disculpe. Firma ahora por justicia.
En mayo de 2025, la defensora armenia de derechos humanos y activista trans Lilit Martirosyan viajaba de São Paulo a Mombasa, con una escala en Dubái. Nunca salió del aeropuerto. Nunca intentó ingresar a Emiratos Árabes Unidos. Aun así, fue detenida, interrogada, se le negó alojamiento en un hotel y le dijeron: "Eres una persona trans – no puedes entrar a Dubái".
La experiencia de Lilit no fue un error aislado. Desde el momento en que hizo el check-in en el mostrador de Emirates en São Paulo, se activaron señales de alarma. Retuvieron su pasaporte por un tiempo inusualmente largo y le hicieron preguntas ajenas a cualquier procedimiento de viaje. Ya en Dubái, fue interceptada en la puerta de embarque, le confiscaron el pasaporte sin base legal, la fotografiaron sin su consentimiento y fue obligada a pasar más de 14 horas sin comida, agua ni descanso.
Ningún ser humano debería ser tratado así – y mucho menos estando en tránsito, sin intención de entrar al país.
Sin embargo, Emirates se niega a asumir la responsabilidad. A pesar de múltiples quejas y pruebas claras de que Lilit tenía derecho a un hotel durante la escala según su propia política "Dubai Connect", la respuesta de la aerolínea fue silencio, demoras y negaciones. Alegan que "no tienen jurisdicción". Pero esto no ocurrió en el vacío – el trato discriminatorio probablemente comenzó con el personal de Emirates en Brasil.
Esto no es solo un fallo en el servicio al cliente – es un acto flagrante de transfobia que viola el derecho internacional. El artículo 9 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos prohíbe la detención arbitraria. La Convención contra la Tortura de la ONU prohíbe el trato cruel y degradante. Y los Principios de Yogyakarta afirman el derecho de toda persona, independientemente de su identidad de género, a no ser discriminada.
Esto importa no solo por Lilit – sino por cada persona trans que se atreve a viajar, a alzar la voz, a moverse por el mundo con dignidad.
La discriminación en el aire, en los aeropuertos y en las fronteras es real – pero rara vez se ve con tanta claridad. Esta vez, tenemos nombres, rostros y hechos.
Ahora necesitamos justicia.
Firma la petición para exigir responsabilidad a Emirates.